De la aceituna al aceite
No sólo canta el vino, también canta el aceite, vive en nosotros con su luz madura y entre los bienes de la tierra aparto, aceite, tu inagotable paz, tu esencia, verde, tu colmado tesoro que desciende desde los manantiales del olivo.
Pablo Neruda
Sabemos desde el principio que el cuidado y la atención durante todo el proceso de producción, de la recolección al envasado, son fundamentales para obtener un aceite de calidad, en el que las fases principales del proceso de producción son las siguientes:
RECOLECCIÓN
Las aceitunas que han alcanzado el grado de madurez adecuado se recogen a mano del árbol, para asegurar que la aceituna no sufra daños, o mecánicamente, con el uso de máquinas específicas (sacudidores o peines mecánicos) que facilitan la separación del fruto y la posterior recolección. Después de la recolección, las aceitunas se llevan hasta la almazara, ya separadas de las hojas e impurezas y lavadas.
MOLIENDA
La aceituna se muele para permitir la extracción del aceite.
ENVASADO
El aceite se envasa en líneas equipadas con máquinas llenadoras, tapadoras y etiquetadoras automáticas e higiénicamente adecuadas.
BATIDO
La pasta de aceitunas que se obtiene de la molienda se vuelve a mezclar para empezar la separación de la fase oleosa.
FILTRADO
Proceso realizado para limpiar el aceite, destacando su brillo y color.
SEPARACIÓN
La pasta de aceitunas se somete a centrifugación (decantación) a fin de separar el aceite del agua de vegetación y del residuo sólido (orujo). El aceite se envía a otro proceso de centrifugación para eliminar el agua de vegetación y los residuos de la pulpa.
